miércoles, 27 de octubre de 2010

En defensa de "Don Juan"

Se acerca el 31 de octubre. Y empezamos a ver en las tiendas calabazas, disfraces terroríficos y adornos con murciélagos. ¿Por qué?

Cuando yo era pequeña, el 31 de octubre, noche de difuntos, siempre ponían "Don Juan Tenorio" en la televisión. Una grabación de "Estudio 1", en blanco y negro. Una obra de teatro ESPAÑOLA y de un autor ESPAÑOL que tiene relación con la fecha y lo que se celebra.

En muchos pueblos de España, se pasaban meses preparando una representación del Tenorio, que hacían en la plaza del pueblo Manolo el charcutero, Pedro el de la pescadería y Benito, el municipal, entre otros habitantes de la villa.

Y no se hablaba de otra cosa que de "Don Juan" y "Doña Inés".

Lamentablemente, influenciados por otras culturas, estamos cambiando aquello de "No es verdad, ángel de amor..." por unos niños chillones que aporrean las puertas vestidos de cualquier cosa, gritando a pleno pulmón: "¿Truco o trato?" y a los que hay que dar caramelos para quitarselos de encima.

Ya no tenemos un cementerio con los fantasmas de los asesinados por "Don Juan" haciéndole la vida imposible. Ahora tenemos un montón de calabazas luminosas y de vampirillos negros decorando todos los escaparates.

Lo siento. Me gusta José Zorrilla y me gusta "Don Juan Tenorio". Y aunque mis hijos, nietos y demás descendientes se empeñen en celebrar "Halloween", para mi seguirá siendo la noche del Tenorio.

Desde aquí, quiero romper una lanza en favor de "Don Juan".

miércoles, 20 de octubre de 2010

"Decisiones arriesgadas" de Mar Carrión



Bueno... vamos a ver como lo hago, porque en mi vida he hecho ni reseñas ni críticas de nada (como no sea de la ropa que a veces se ponen las quinceañeras)....

Tengo una amiga (bueno, yo al menos la considero mi amiga a pesar de que aun no nos hemos podido achuchar como Dios manda) que se llama Mar Carrión. Hace dos años publicó su primera novela, "Bajo el cielo de Montana", de la que quedé completamente enamorada. Y hoy, por fin, he conseguido su segunda novela recién publicada... y me la he leído del tirón.

Esta es la sinopsis, sacada directamente del blog de Mar:

"La joven periodista Megan Lewis encuentra el cadáver de su vecina cuando pasa a recoger a su perra, un caniche al que Emily cuida cuando ella está trabajando. La mujer ha sido cruelmente asesinada y Megan necesita descubrir la verdad que se esconde tras un crímen tan espantoso.


Derek Taylor, el policía encargado de la investigación, es también un amigo de la víctima que no va a parar hasta esclarecer quién o quiénes son los culpables. Pero mientras él investiga el caso no para de tropezarse con Megan, que no cesa de meter su linda naricita en sitios donde no la llaman.


Lo que ninguno de los dos espera es encontrarse con un caso mucho más complicado de lo que parecía en un principio y donde cualquiera puede estar implicado."


La verdad... no sé como empezar a comentar lo que me ha parecido el libro... porque diga lo que diga me voy a quedar corta. Mar es una artista de la palabra. Sabe expresar con claridad y sencillez cualquier situación, y con una nitidez que hace que el lector sea capaz no sólo de leer la escena, sino de "vivirla". Leyendola notas los olores, oyes los sonidos, sientes la lluvia en la cara...
¿Y que decir de los personajes principales? Derek es un "tipo duro" pero, contrariamente a los personajes masculinos de las novelas románticas, no tiene miedo de expresar sus sentimientos hacia Megan, ni de implicarse emocionalmente con las personas que le rodean, lo cual he de decir que me encanta.
Y Megan, sin embargo, es el extremo opuesto. Por sus circunstancias personales tiene miedo de la dependencia emocional.
Los dos son personajes "reales", con reacciones reales, que te hacen sentir que estás presenciando sus conversaciones o sus encuentros.

En fin... me he reído, he llorado, me he emocionado, me he cabreado, me he impacientado.... y hasta he llegado a gritarle a alguno de los personajes del libro como se grita a un árbitro en un partido de fútbol.

Pero mañana me lo leo de nuevo.... por si me he perdido algún detalle!!!

¡FELICIDADES MAR! Cada día me convenzo mas de que eres una artista.

jueves, 14 de octubre de 2010

El pozo San José

Hoy es un día alegre en mi corazón. Treinta y tres mineros enterrados en un pozo a casi 700 metros de profundidad han visto la luz del día. Han sido dos meses de esfuerzos, de pruebas, de sufrimientos y de dudas. El miedo principal era que el sistema de rescate diseñado no funcionase.

Admiro al valiente que subió el primero a la plataforma, porque se ofreció de "conejillo de indias" para probar el tubo, sin saber si aquello iba a sacarlo a la superficie, o si por el contrario lo dejaría embutido en un cubículo de 60 cm sin apenas aire para respirar.

Admiro al que esperó para subir el último. Esa hora que estuvo completamente solo en la mina, lleno de miedos, de incertidumbre en la mas absoluta soledad.

Admiro a los equipos de rescate, que han luchado con todas sus fuerzas para sacar a los mineros del fondo del pozo.

Admiro a las familias que han estado en el campamento "Esperanza", sin perder la suya propia, anhelando este momento que por fin ha llegado.

Y es en estos momentos cuando se me vienen a la cabeza canciones que he escuchado desde pequeña, como "El pozo Maria Luisa" o "La planta 14", ambas de Victor Manuel, en las que relata las tragedias sufridas por los mineros. ¡Que terrible profesión! ¡Y que mal reconocida!

Los mineros trabajan muchas horas, día tras día, en el fondo de un pozo que se les puede venir abajo, a riesgo de no volver a salir, con el miedo de un derrumbe, con afecciones pulmonares, musculares y óseas para, cuando son mayores y ya no sirven para ese trabajo, quedarse con una jubilación mínima, mientras los señores diputados, senadores y demás politicuchos cobran un sueldo excesivo sin necesidad siquiera de acudir a su puesto. Y con sueldos vitalicios una vez abandonado el cargo. O los futbolistas, con cuyos fichajes millonarios se podría levantar la economía de todo un país tercermundista.

Es triste.... pero el mundo no está hecho para los pobres. No se premia el trabajo efectivo, ni los riesgos laborales. No. Se premia que uno sea más o menos carismático, que tenga mayor o menor poder de convicción de gentes. Que mueva más o menos masas.

Hoy ha habido un milagro. Por una vez las portadas de los periódicos no hablan de un político, ni de un equipo de fútbol o un futbolista, ni siquiera de un famoso mediático. Hoy hablan de gente corriente. De esos mineros que despues de dos largos meses de entierro, de desesperanza y de miedo vuelven de nuevo a la vida.

viernes, 1 de octubre de 2010

Pues aqui estamos

A mis amigas les prometí una sorpresa para el otoño. Y no sé si será o no será una sorpresa, pero he creado este blog con intención de vaciar en él trocitos de mi alma. Pensamientos que corren por mi cabeza. Ideas que se me ocurren. Historias que no he contado nunca a nadie...

Algunas serán alegres y otras tristes. Las habrá largas y cortas. Entretenidas y aburridas. En general, para todos los gustos.

Espero leeros por aquí de vez en cuando. Siempre es bueno estar rodeada de amig@s.

Sed bienvenid@s a vuestra casa...